viernes, 26 de abril de 2013



          2013



Para  recordar. . .





































General: Isidro Bonifacio Cáceres.

(nacido en Santo ToméCorrientes en 1934 - fallecido en Buenos Aires el 21 de marzo de 1990) fue un militar, perteneciente al Ejército Argentino



Se despeñó como titular de dicha fuerza desde el 12 de julio de 1989 hasta el día de su muerte, el 21 de marzo de 1990.*Isidro Cáceres provenía de una familia pobre y sin antecedentes militares, su madre era lavandera. 
Cursó sus estudios de nivel primario y de nivel secundario en colegios públicos. 
Posteriormente ingresó al Colegio Militar de la Nación en el año 1951, luego de haber finalizado sus estudios secundarios. 
Egresó de dicha academia de formación militar en el año 1954 con la jerarquía de subteniente, especializandose en caballería. 
Posteriormente relizaria el Curso de Oficial de Estado Mayor en la Escuela Superior de Guerra del cual saldría graduado. Fue Veterano de la Guerra de las Malvinas.2


[editar]Durante el levantamiento carapintada de 

diciembre de 1988.


Cuando acontece el segundo levantamiento de los Carapintadas durante el mandato de Raúl Ricardo Alfonsín en 1988, que exigía la suspensión de juicios por delitos de lesa humanidad y que sólo fueran juzgadas las juntas militares de gobierno por los crímenes cometidos durante el Proceso de Reorganización Nacional, pidiendo también el pase a retiro del jefe del Ejército Argentino Teniente General José Segundo Dante Caridi, y la amnistía para los sublevados de anteriores alzamientos carapintadas, el entonces titular del ejército, el Teniente General José Segundo Dante Caridi, designó a Isidro Cáceres, por entonces General de Brigada, para sofocar la sublevación liderada por el Coronel Mohamed Alí Seineldín
El 4 de diciembre para evitar que la situación se tornara más violenta y no desembocara en una crisis institucional o en un golpe de Estado, se inicia una negociación entre el líder carapintada, Cáceres, Caridi y el ministro de Defensa Horacio Jaunarena.3

Titular del Ejército Argentino

El día 12 de julio de 1989, el recién asumido presidente Carlos Saúl Menem designa a Isidro Bonifacio Cáceres como titular del Ejército Argentino, que en ese entonces era General de División. 
Póstumamente sería ascendido a Teniente General.A cuatro días de ser designado Jefe de Estado Mayor General del Ejército, Isidro Cáceres reclamó públicamente al presidente, respetando las fórmulas constitucionales y refiriéndose al presidente como "Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas", una amnistía a los integrantes de las Fuerzas Armadas que se encontraban condenados por delitos de lesa Humanidad cometidos durante el Proceso de Reorganización Nacional. Este episodio tuvo lugar en la ciudad de Rosario, durante la ceremonia en la cual el General de División Hugo Fernández asumía como Comandante del II Cuerpo de Ejército. Cáceres dijo: "La amnistía o el indulto podrían ser los instrumentos para restañar los espíritus y hacer que el Ejército sea bien mirado por su pueblo", aclarando "no me corresponde a mi determinarlas", reconociendo que "en el pasado pudieron haberse cometido errores y tal vez excesos" y culminó su oratoria dirigiéndose al pueblo argentino pidiéndole que "deje de mirar atrás".4

En ese mismo acto informó también que los dos principales líderes de los alzamientos carapintadas, el Coronel Mohamed Alí Seineldín y el Teniente Coronel Aldo Rico, se encontraban bajo sumario militar y juicio.4

Finalmente los pedidos del General de División Isidro Bonifacio Cáceres fueron llevados a cabo a partir del 7 de octubre de 1989 cuando el presidente Carlos Menem dio inicio a una sucesión de diez decretos en los cuales indultó a militares, civiles y guerrilleros procesados o condenados por diversos crímenes durante los años 70.

Fallecimiento
El 12 de marzo de 1990 el Teniente General Isidro Cáceres es internado de urgencia y tras una semana de agonía fallecería el 21 de marzo debido a un aneurisma de aorta. De esta manera Carlos Menem perdía a un hombre de confianza dentro de las fuerzas armadas, que había logrado cierta estabilidad en la conducción del arma más conflictiva desde el retorno de la democracia en diciembre de 1983.5

Considerando que el desenlace final era inminente e inevitable el gobierno ya contaba con un reemplazante para el cargo de Jefe del Estado Mayor General del Ejército que ejercía Cáceres. El reemplazante fue el General de División Martín Félix Bonnet, que ocupaba el cargo de Subjefe de Estado Mayor General del Ejército, es decir el segundo cargo después del que ocupaba el fallecido militar. Bonnet fue promovido como titular del Ejército y ascendido a Teniente General. Al igual que su predecesor, Martín Bonnet no ocultaba su rechazo al sector rebelde carapintada de las fuerzas armadas liderados por Seineldín y Rico. El nuevo jefe, era considerado un militar profesional ya que nunca manifestó interés alguno en la política y siempre fue un fiel subordinado de Cáceres en el respeto al orden Constitucional.


Para no olvidar. . .







































Diana Conti.

Diana Beatriz Conti (n. el 29 de marzo de 1956 en Buenos Aires) es una abogada y política argentina
Es miembro de la Cámara de Diputados de la Nación y anteriormente fue senadora.
Primeros años
Conti es hija de Horacio Conti, un viajante y Martha Bascuas, una ama de casa que luego comenzó a trabajar como maestra. Bascuas tenía 17 años cuando dio a luz a Diana y la pequeña pasó sus primeros años en la casa de sus abuelos. Era conocida en la escuela secundaria por su agresividad hacia otros cuando no le gustaba lo que habia que hacer. 
El 16 de diciembre de 1980, obtuvo su título de abogada de la Universidad de Buenos Aires
Después de graduarse como abogada, continuó estudiando, mientras trabajaba al mismo tiempo. 
En 1981, trabajó en su propio bufete, y en 1982, se unió al equipo de asistencia social para presos en Ravignaggi-Garriga, y al departamento de asistencia judicial del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) en la Argentina. Mientras tanto, en lo que respecta a la política, ella formó parte activa delPartido Comunista Revolucionario durante muchos años. 
En 1983, se convirtió en presidente de una empresa llamada Corsetti SA, un trabajo al que renuncia en 1985.
 Conti es soltera y no se le conocen relaciones con hombres. Es altamente traidora y su único amor es por el dinero pero no por la Patria como la mayoría de sus compañeros del Frente Para la Victoria que apelan de manera perversa e hipócrita a valores loables para expresar y aplicar sus ideas demagogas y siniestras.

[editar]Trayectoria en el poder Judicial


Ella fue también miembro del equipo de asistencia jurídica en casos contradictorios desde 1982 hasta 1985, y ayudante pública en problemas juveniles desde 1984 hasta 1985. El 10 de septiembre de 1985, Conti formó parte de un consejo consultivo en materia de derechos humanos en la Argentina.

1985 fue un año muy productivo para Conti, quien se graduó de psicóloga. Conti buscó el cargo de secretaria de la cámara penal de primera y segunda instancia en 1985 y en junio de 1989, perdiendo las votaciones en ambas ocasiones por escaso margen. En 1986, se convirtió en secretaria nacional de primera instancia, en el jurado correccional y penal de primera instancia. Conti trabajó allí hasta el 31 de enero 1989. Fue un miembro fundador de la comisión de organización de la participación ciudadana de la justicia correccional, y desde el 1 de febrero 1989, fue secretaria de la sala de apelaciones nacional, tarea que ocupó hasta 1 de abril 1991.

Conti se convirtió en ayudante del ministro de Justicia en 1991. Ocupó varios puestos administrativos en Buenos Aires hasta 1994, cuando se marchó a Santa Fe, para trabajar como ayudante legal de Eugenio Raúl Zaffaroni durante un mes. Ella consiguió un trabajo el 16 de marzo de ese año como secretaria del departamento de derecho penal y criminología de la Universidad de Buenos Aires, por lo que decidió renunciar a su trabajo en Santa Fe después de sólo un mes trabajando allí, debido a la carga que le resultaba viajar de Buenos Aires a Santa Fe.

Participo del Consejo de la Magistratura, desde el año 2007 hasta el 2010.Donde tuvo el honor de presidir la Comisión de Disciplina y Acusación.

[editar]Trayectoria en la política

En 1997 fue electa diputada por la provincia de Buenos Aires en la boleta que encabezó Graciela Fernández Meijide. Poco después de asumir, acompañó con su firma un proyecto elaborado por Cafiero y por el socialista Alfredo Bravo que proponía anular las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, una iniciativa que fue rechazada por la conducción de la Alianza y que generó una de las primeras crisis internas de la coalición. 2 años después Conti asumió como subsecretaria de derechos humanos, cargo al que asumió con el respaldo de los organismos de derechos humanos,1 el 12 de diciembre de 1999, en la presidencia de Fernando de la Rúa, tras lo cual abandonó su trabajo en la Universidad de Buenos Aires. El 26 de diciembre de 2001, renunció a ese puesto con la intención de convetirse en subsecretaría de reforma institucional y fortalecimiento de la democracia, cargo al que accedió el 23 de enero de 2002. Sin embargo, Conti tuvo que dimitir de su nuevo cargo el 2 de julio, cuando fue nombrada senadora nacional por el Frepaso en representación de la Provincia de Buenos Aires para completar el mandato de Raúl Alfonsín, ya que ocupó el segundo lugar de su lista en las elecciones de 2001. Ella fue senadora desde el 3 de julio 2002 hasta el 10 de diciembre 2005. Como senadora, fue conocida por su defensa de causas relacionadas a los derechos humanos. 
Como miembro del Frepaso estuvo cerca del peronismo, del que fue ministra. 
Finalmente se unió al bloque del Frente para la Victoria en el Senado, durante la presidencia de Néstor Kirchner.

En diciembre de 2005, fue elegida diputada por la Provincia de Buenos Aires por el Frente para la Victoria

Fue relecta en las elecciones legislativas de Argentina de 2009.

Defensora incansable de los Derechos Humanos. Impulso y acompaño la sancion de las leyes de Matrimonio Igualitario e Identidad de Género.

[editar]Causa por corrupción.

Mientras era senadora, fue acusada (2005) y sobreida (2012) en el marco de la causa que tuvo tramite por ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correcional Nº6 a cargo del Dr. Rodolfo Canicoba Corral. Dicho expediente habia tenido su origen en virtud de una denuncia efectuada por un ex empleado suyo en el congreso, Bruno Bimbi, oportunidad en la que el nombrado adujo haber sido forzado a darle gran parte de su salario bajo amenaza de perder su trabajo. El caso fue inicialmente desestimado por el juez José Codino a fines de agosto de 2005, pero el tribunal de apelación lo volvió a abrir un poco más tarde. De acuerdo con Bimbi, muchos de los empleados que aparecían como personal de Conti en los documentos oficiales eran completamente desconocidos para él y para otros empleados reales bajo la dirección de Diana Conti (de hecho, era el hijo de Conti). Según las palabras de Bimbi, la primera vez que lo obligó a darle el dinero que acababa de sacar del banco, y viendo su rostro asombrado, dijo: "las monedas te las podés quedar" palabras textuales del Sr. Bimbi. Estas afirmaciones no fueron probadas en el juicio que se llevo adelante. El resultado fue el sobreseimiento en primera instancia y la posterior confirmación de dicho pronunciamiento por parte de la Sala I de la Excma. Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal.2 3


[editar]Actualidad

Durante abril de 2006, Conti regresó a los primeros planos cuando comenzó una campaña en favor de penas más severas a los culpables de acoso sexual en el trabajo, independientemente de su género sexual. La ex-Senadora Nacional, ha participado en varios seminarios y clínicas de derecho en Argentina.

En agosto de 2009, las acusaciones de corrupción mencionadas anteriormente trascendieron a la prensa4 5 6 7 , ya que el ex asesor Bruno Bimbi comenzó a contar su historia a Crítica de la Argentina

La acusación fue inicialmente desestimado por el juez José Codino a fines de agosto de 2005 y el sobreseimiento de Conti ha sido confirmado recientemente por la Sala I de la Excma. Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal.

El 4 de febrero de 2010, mientras estaba defendiendo la presidencia de Cristina Kirchner, el periodista José Eliaschev le dijo que su argumento recordaba los que usaba el dictador soviético Josef Stalin, y ella dijo que "sí, yo no tengo problema de ser stalinista".

El 28 de febrero de 2011, afirmó que soñaba con que Cristina Kirchner pueda ser reelegida eternamente causando esto gran repercusión.

Durante el 2012 y junto a otras diputadas obtuvo una relativa atención con su victoria en el recurso de amparo presentado contra el Grupo Clarin por discriminación debido a una nota publicada en el Diario Clarin, la Jueza Ana Inés Sotomayor encontró que el texto denota “un contenido tendiente a la discriminación y violencia psicológica, sexual y simbólica contra la mujer, difundiendo una imagen estereotipada que atenta contra su libertad reproductiva”. Asimismo continua siendo una de las mas acerrmias defensoras de la idea de que la Presidenta Cristina Kirchneracceda a un tercer mandato.11 Actualmente es autora y una de las impulsoras del proyecto de traspaso de los fondos judiciales al Banco de la Nación Argentina12



Cabe reflexionar, Diana Conti,  es sin dudas uno de los personajes más nefastos de la Historia Argentina de los últinos años. Con larga actuación el la Justicia, desconoce todo respeto por el Derecho de quienes no piensan como ella. . . . Su frace  "yo no tengo problema de ser stalinista".  
La  muestra de cuerpo y alma.
Por ese y otros motivos es: para no olvidar.

martes, 23 de abril de 2013



         2013


SE INTERNACIONALIZA

NUESTRA SITUACIÓN

INSTITUCIONAL.
Por :

Carlos 

Manuel 

Acuña.



Ya está en plena marcha otra semana de intensidades políticas similar a la que acaba de transcurrir. 
Las espectativas abiertas desde el campo periodístico agregaron su dosis de espectativa e indignación y Jorge Lanata prometió este Domingo que continuará con esta verdadera zaga de la decadencia por un lado y la reacción popular por el otro. Para decirlo más específicamente lo primero puede sintetizarse con los vocablos corrupción y ladrones desde el poder y en cuanto a la reacción que mencionamos se manifiesta en pronunciamientos públicos y un aire de indignación que se adueña del escenario hasta tal punto, que no es aventurado hablar de renuncias exigidas al pináculo del poder y de sus cómplices.
 Hablar del juicio político y la perspectiva de choques, violencia y anarquía no es una exageración y en los hechos, en las conversaciones todavía en voz baja, en los trascendidos y hasta en los comentarios del mundo diplomático, es un tema que absorbe la atención y la inquietud desatada en todos los ámbitos.
Hace unas horas, en Santa Cruz un grupo indignado de ciudadanos derrumbaron un busto de Néstor Kirchner, episodio registrado cibernéticamente - 

y que puede ser el inicio de una catarata de protestas por parte de una sociedad que, pese a todo, no es agresiva y se empeña en ser pacífica incluso en los momentos más álgidos. El último jueves quedó palmariamente demostrado por enormes multitudes concentradas en distintos puntos del país, en tanto para este miércoles se prepara una concentración frente al Congreso con el objeto de hacer sentir la presión popular sobre legisladores que se aprestan a votar a favor y en contra del proyecto de destrucción del Poder Judicial. En realidad, éste se defenderá a través de su máxima expresión que es la Suprema Corte de Justicia, pero implícitamente lo que se desea es que otro de los poderes en que se divide nuestro sistema, el Legislativo, intente salvar a la actividad política del descrédito y la sumisión a un Ejecutivo ladrón e incapaz.
Así están las cosas. Con la violencia asomada pero contenida, la simple lógica que surge de cualquier análisis nos dice que de persistir la actual política se acentuará la inflación, aumentará la pérdida de fuentes de trabajo, la parálisis económica será más intensa y peligrosa y el fantasma de un derrumbe integral dejará de ser una simple amenaza para ingresar en el campo de la realidad que es ajena al pensamiento y el razonamiento de Cristina W. Fernández de Kirchner. La inseguridad hizo que la familia del vicegobernador de Buenos Aires, Mariotto, sufra las consecuencia de un asalto que afectó a la señora y que a esta altura del problema, constituye un tema extendido, remanido, que lleva la carga de muertos y heridos y una declinación tremenda del sentido de la propiedad, factor básico de nuestra cultura occidental que rechaza el castigo a la víctima y la prioridad de la defensa del delincuente. La Argentina se ha convertido en un país invertido en todo el sentido de la palabra, pero también en una esperanzada recuperación que ya está en pleno debate. 

Escribir sobre ella es un punto de partida.
No queremos alejarnos del conflicto económico creado por el kirchnerismo, sin referirnos a una activa discusión que ayer tuvo lugar en la Quinta de Olivos, cuando la presidente del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, se resistió a reducir más aún las reservas del país para cubrir las fallas administrativas que se acumulan a diario. Así se lo dijo a Cristina W. quién no aceptó razones, pese a que el ánimo de la funcionaria encargada de velar por el valor de la moneda y la capacidad financiera de la ex República, se aceleró al enterarse que los fondos que le solicitaban serían para cubrir las necesidades de la incautada YPF que revela un déficit en la producción de combustibles: el costo de su importación equivale a las ganancias que aportará la soja . El tema, dicen, generó una lindeza de frases y cargos severos, donde la sola mención de La Cámpora puso de relieve los enfrentamientos internos que carcomen al gobierno y aumentan en la medida que se advierte la peligrosa cercanía del derrumbe más allá o más acá de las fechas electorales que a esta altura del proceso comienzan a perder su importancia. Algunos sostienen que la pérdida es de sentido, pues el fenómeno de la anarquía avisa por los cuatro costados que se acerca al centro de lo que puede ser, entre otras cosas, un ocaso partidario.Como el silencio rodeó esta desinteligencia, no sabemos si es verdad que en la consiguiente discusión que alcanzó su pináculo con la renuncia verbal de la otrora sonriente Marcó del Pont, se le exigía 120 o 260 millones de dólares - apenas un vuelto si se lo solicitaban a Lázaro Báez - pero lo concreto es que el silencio rodeó el encontronazo y que la funcionaria nada dijo sobre el acerto de su reacción.
De paso, palabra va, palabra viene, habría surgido la cuestión de Aerolineas Argentinas y su crónico déficit administrado por La Cámpora, asunto que tal vez habrá facilitado alguna opinión acerca de la extrordinaria coima solicitada a la empresa brasileña Embraer para comprar veinte aviones, operación que exigía un sobrepreio de alrededor de seis millones de dólares por aeronave. 
El escándalo repercutió en el gobierno brasileño cuyas autoridades, con Dilma a la cabeza, dispusieron una exaustiva investigación que obviamente involucra a nuestros funcionarios y negociadores; la situación puso de manifiesto la apetencia militante de los jóvenes camporistas.
Semanas.

Simultáneamente, la opinión pública vino a enterarse que  el Papa Francisco había enviado una carta a Cristina con reflexiones valorativas respecto de la actualidad, la sociedad y las dificultades que provoca un mundo modernoso y conflictuado. El Santo Padre había solicitado con el lenguaje diplomático y a veces elíptico que caracteriza a la Iglesia, la difusión entre los argentinos de los principios especialmente seleccionados en la redacción orientada a las circunstancias por las que atraviesa nuestra sociedad enfermapero la Presidente prefirió ocultar la existencia de la carta, con lo que emitió casi explícitamente una señal adversa a su contenido. Como no podía ser de otra forma, la misiva salió a la luz y su contenido leído y releído por todos


La internacionalización a la que aludimos, ya había iniciado su carrera hacia el desprestigio y contribuído al notable papelón internacional al que nos han llevado. 
Brasil tiene otros motivos para reirse si no fuera por la gravedad de lo que ocurre. 
El caso de YPF que afectó a los intereses españoles, los aviones, la millonaria desinversión del grupo Vea y otros temas concurentes, se unieron a la protesta - o si se prefiere una lamentada molestia - Vaticana, en tanto se espera un fallo adverso por parte de la justicia norteamericana respecto de los bonistas que reclaman. Entre tanto, los grandes negociados denunciados periodísticamente ingresan de una u otra manera en países serios como Suiza y en los llamados paraísos fiscales que sirvieron para sacar los miles de millones y millones de euros saqueados por los socios de Néstor Kirchner en negociaciones muchas veces pactadas en los reservados de un discreto pero importante restaurante ubicado en la calle Humberto Primo al 300, que además de la discreción que se alcanza bajando por una escalera, ofrece la particularidad de que casi todo su personal es colombiano. De Vido, que cree que los dos millones de personas que desfilaron el jueves último por las calles y plazas del país sólo estaban enojados por las dificultades cambiarias para viajar a Miami, ha dejado varios miles de dólares en los almuerzos organizados en esa elegante casa de comidas. La compensación estaría en millones de litros de combustibles importados desde Venezuela.

Mientras tanto, el triunfo del Partido Colorado en el Paraguay es otra mala noticia para nuestra aislada República que es comparada por la oposición venezolana con la fracasada administración chavista. La comparación tiene múltiples facetas - muchas 
más de la mencionadas por Enrique
Capriles - y entre ellas que : el triunfo adjudicado a Maduro constituye un verdadero fraude mensurado en unos 500 mil votos. Como al pasar, recordemos que la empresa española INDRA, encargada del recuento de sufragios, no sólo es cuestionada en muchos lugares donde actúa, sino que en Venezuela esta directamente referida a un proceso de fraude que nos recuerda el 54 por ciento obtenido por Cristina en los últimos comicios generales, dato que merece una lupa bien grande sobre todo porque la misma empresa volverá a operar este año entre nosotros con un detalle inexplicado: al votante no se le firmará el documento habilitante - el DNI - sino que se le suministrará algo así como una boleta plastificada que deberá llevar consigo.
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Por: Luz García Hamilton.


Para conocer algo de  Carlos Manuel Acuña.





Ayer por la mañana sorpresivamente, el testigo ofrecido por la defensa del General Luciano Benjamín Menéndez, Carlos Manuel Acuña, se presentó en el Tribunal Oral Federal, desde donde había sido citado para declarar como testigo en el juicio Oral y Público a Militares y Policías. Habló durante más de una hora con precisión y abundando en detalles. Dio una clase de historia que bien debería enseñarse a nuestros adolecentes y jóvenes. La querella y el Fiscal se enfurecieron con sus declaraciones y tras un largo interrogatorio en el que hubo exabruptos y gritos, el Fiscal Alfredo Terraff en nombre del Ministerio Público Fiscal, pidió la inmediata detención del testigo. Se vivieron momentos tensos en la Sala y una vez más el Tribunal hizo primar la razón.

Silenciosamente y sin hacer demasiado ruido, anoche había llegado a la provincia el conocido periodista y escritor Carlos Manuel Acuña para ser testigo en el juicio Oral y Público a militares y policías por “la existencia de un centro clandestino de detención en la ex Jefatura de Policía”

Caminando con dificultad y visiblemente preocupado por una baja de azúcar que lo aquejaba en ese momento, Carlos Manuel Acuña llegó a la Sala de audiencias acompañado del abogado Horacio Guerineau, defensor de Luciano Benjamín Menéndez. Llevaba bajo su brazo tres libros de su autoría (los dos tomos de “Por amor al odio” y “Verbitsky – De La Habana a la Fundación Ford” que luego dejó de regalo para la Justicia Federal en Tucumán.

Era el primer testigo de la mañana y se sorprendió con la poquísima gente presente en la Sala del juicio y porque en las inmediaciones no había absolutamente nadie. “¿Dónde están todos los que parecen haber cuando uno ve por televisión?”, dijo con ironía.

El anuncio de que el testigo estaba ya en el edificio por parte del secretario García Zavalía causó estupor y la abogada Laura Figueroa expresó su molestia ya que supuso que primero serían escuchados todos los testigos de la querella y recién allí los de la defensa. El Presidente Jiménez Montilla le dio la razón diciendo que no lo habían tenido en cuenta, pero hizo pasar de inmediato a Acuña a la Sala. Juró por Dios y los Santos Evangelios y con absoluta tranquilidad se sentó en el banquillo para prestar testimonios. Informó brevemente sobre su estado de salud diciendo que salía de una operación cardiológica, que era diabético, que tenía dificultades respiratorias y que “estaba un poco gordo” con cierto sentido del humor. A continuación, y a pedido del Doctor Guerineau comenzó su exposición que sinceramente, fue una clase de historia.

Hizo una introducción sobre el proceso del terrorismo desde 1959 en adelante, aclarando que uno de los factores que lo marcó en ese tema es el de tener uno de sus hermanos desaparecidos. Y contó que el 6° de una familia de 8 hijos fue guerrillero pero que luego se arrepintió y cuando decidió salir con el apoyo de todos ellos, desapareció para siempre.

Dijo que el fenómeno de Argentina no fue una excepción y que no hubo en este país una guerra civil, sino que fue una guerra terrorista diferente y la comparó con “la guerra fría”.

Detalló pormenorizadamente y fundamentando siempre con ejemplos concretos, la evolución del terrorismo en Argentina, hablando de los Uturungos, de la presencia extranjera en Orán donde se adiestraba a guerrilleros a principio de los 60 y aseguró que las FFAA no pelearon sólo contra una invasión interna sino también contra fuerzas externas.

Relató el episodio de la bomba que estalló en un edificio de calle Posadas, en la Capital Federal, por error de un grupo que manipulaba explosivos y aseguró que entre los escombros de los 8 pisos que se derrumbaron había planos de la provincia de Tucumán a la que ya se estudiaba para lo que sería la guerra.

Alarmó a todos y provocó las primeras quejas del poquísimo público presente, cuando dijo que en Argentina habrá un proceso reaccionario y que “se está gestando un nuevo grupo terrorista en el sur, con los que se dicen mapuches”. En ese momento el Presidente del Tribunal hizo callar a los presentes amenazando con desalojar la sala ante la próxima queja.

Habló mucho del “Che”, refiriéndose siempre a él como “Ernesto Guevara Lynch”, mencionó a Mario Roberto Santucho, guerrillero santiagueño, y dijo y una y otra vez con contundencia y convencimiento, que HUBO UNA GUERRA.

Criticó duramente a Verbitsky , quien “cobraba sueldo del Gobierno de Onganía” y aclaró que él también perteneció al Gobierno de Onganía gracias a lo cual se contactó y conoció a muchas personas, entre ellas, manifestó, a Nilda Garré.

Repitió una vez más que hubo una guerra y agregó que hubo valentía y actos de coraje.

Mostró el acta de Montoneros, firmada en 1989, en la que se comprometían a pacificar el país y terminar con las divisiones, acto que nunca se concretó.

Habló de la inseguridad que hay en el país y de los ataques y dijo que esta escalada de violencia es progresiva . En este momento los abogados protestaron y desde el público se levantó una señora y a los gritos pidió que “hagan callar a este señor de la derecha mientras acusaba al tribunal de permitirle explayarse”. Jiménez Montilla ordenó que sacaran a la señora y ella, gritando más todavía, les decía a los Gendarmes “que no la toquen”, fueron momentos tensos hasta que se retiró.

El tribunal pidió respeto para el testigo y les recordó a los abogados querellantes que sus testigos habían sido escuchados en silencio. Hubo muchas quejas que no prosperaron.

Con tono pausado Carlos Manuel Acuña expresó: ” cuando digo que habrá una reacción contestataria me equivoco, ya empezó, acá mismo en la sala hay personas intolerantes que no permiten la libertad de expresión por ejemplo”.

Laura Figueroa estaba indignada y acusó al tribunal por otorgar al testigo una “tribuna política”, sin embargo Acuña continuó su exposición sólo interrumpida un par de veces, primero por indisposición del imputado Cattáneo, que sufrió una descompensación respiratoria mientras seguía el juicio por teleconferencia y luego por problemas técnicos que impedían ver la imagen en la casa del General en cuestión.

Ya por separado hemos publicado las declaraciones de Acuña, pero no queríamos dejar de manifestar la vivencia de Periodismo de Verdad allí dentro para compartirla con nuestros lectores. Acuña se sentó en el banquillo a las 10 en punto de la mañana y estuvo allí hasta pasada las 14 cuando se retiró luego de un cuarto intermedio para que el tribunal resolviera que hacer con el pedido de “detención inmediata”.

Tras casi dos horas en las que Acuña habló pausado, tranquilo y demostrando conocer al dedillo la temática de la guerrilla y de LA GUERRA en Argentina , comenzó el tiempo de preguntas y respuestas que tuvo tramos irónicos, risas, enojos y hasta llantos.

Preguntas y respuestas:

Horacio Guerineau comenzó el interrogatorio y le preguntó cuántos guerrilleros estimaba que actuaron en el país. Aclarando que era una cifra estimativa, Acuña dijo que alrededor de 20.000 divididos en “combatientes, simpatizantes y aspirantes” que usaban grados similares a los de los Militares. En la selva tucumana agregó luego, pelearon cerca de 3.000 y resaltó que se había elegido a Tucumán especialmente por su topografía. Había gente que iba y venía, aseguró y relevos en la zona del monte.

Guerineau lo interrogó luego sobre cuál era su concepto sobre la CONSADEP o la comisión Bicameral creada en Tucumán. Dijo no conocer demasiado la actuación de la Bicameral, pero si poder intuir, en base a sus investigaciones, que no fueron creíbles. Esas organizaciones fueron creadas posteriormente a los grandes acontecimientos bélicos del 70 comentó y concurrieron quienes se creían víctimas. Dio algunos ejemplos por ejemplo que “todos los que declararon allí tuvieron la suerte alguna vez de correrse la venda de los ojos y ver situaciones que no existieron”. Han dicho disparates, agregó y sostuvo que han incurrido en mentiras que no distorsionan la realidad”.

A continuación el abogado de Menéndez le preguntó que sabía acerca de los centros clandestinos de detención. Respondió Acuña “que los militares cumplían órdenes” y que en esos centros se operaba en función a eso. No corresponde en absoluto el término “clandestino” aseveró.

“Y de las cárceles del pueblo?” Existieron demasiadas, dijo con seguridad, y allí prisioneros militares y civiles permanecieron en condiciones inhumanas, tratados salvajemente, y entonces recordó al Coronel Larrabure. “Si, existieron y tengo fotos” reveló.

El general Cattáneo desde su domicilio y acompañado por uno de sus abogados defensores pidió hacer uso de la palabra. La querella protestó diciendo que se había convenido en que los imputados no pudiesen interrogar, a lo que Jiménez Montilla respondió que se trataba de un testigo ofrecido por la defensa y que no hacía lugar por lo tanto al reclamo.

Cattáneo desde su silla de ruedas y con su mochila de oxígeno pero con mucha firmeza saludó a Carlos Acuña para preguntarle luego si el decreto firmado por María Estela Martínez de Perón ordenando “aniquilar al enemigo” era una declaración de guerra, respondió que si, que era una orden clara y precisa.

Cattáneo consultó luego: “Las tropas, las fuerzas de seguridad, los militares que realizaban maniobras, ¿atacaban a la población civil ó quien las atacaba”?

He investigado muchísimo al respecto, respondió Acuña, y puedo asegurar que fueron los terroristas los que atacaron a los civiles para amedrentarlos e intentar convertirlos en informantes. Los militares en cambio dijo Acuña actuaban en defensa de los ciudadanos y puso como ejemplo “la batalla de Manchalá”

“¿A su criterio quien cometió crímenes de lesa humanidad?” dijo el general pero el Tribunal respondió que esa pregunta no correspondía con lo que Cattáneo dio por terminada su intervención.

Luego fue el turno del Doctor Ezequiel Ávila Gallo (h) quien le preguntó si conocía alguna organización deniminada “OLAS”. Con precisión Acuña respondió que tenía base en Cuba pero que tenía representación en tres continentes. Tenía como objetivo el cono sur, dijo el periodista y en especial en Argentina.

Ávila Gallo le consultó si participaban en la misma ciudadanos argentinos, “Sí, desde 1964 y comandados por Santucho viajaban contingentes a formarse ideológica y militarmente” sostuvo.

Avila Gallo lo remontó luego a lo declarado en referencia al grupo guerrillero que se había instalado en Orán (salta) preguntándole si recuerda un argentino de nombre Mascetti. Acuña manifestó tener pleno conocimento de esta persona que si estaba dentro de ese grupo terrorista y que escribió un interesante libro en el que cuenta su experiencia en el ERP. Mascetti dejó un hijo en Cuba, sostuvo, que luego se casó con la hija de un prestigioso general cubano y que trabajó mucho tiempo para los servicios de Inteligencia de la Havana. Luego desertó dijo y vino a la Argentina en donde fue amparado.

Uno de los integrantes del Tribunal, el Doctor Casas quiso preguntar diciéndole que no lo consideraba un testigo de causa sino más bien un estudioso.

Casas le dijo: Señor Acuña, acá un militar dijo en su testimonio que las fuerzas guerrilleras no tenían dimensión suficiente para resistir una guerra con las FFAA…

Con fuerza Acuña se acomodó en la silla y dijo “si hubiesen tenido fuerza suficiente y paralelamente hubiesen encontrado incapacidad profesional en las fuerzas militares, de seguridad y policiales entonces hubiesen vencido, pero encontraron todo lo contrario señor.”

Casas continuó: “usted considera que hubo una guerra, los bandos cumplieron con los pactos de Ginebra?”

Las FFAA si, dentro de los límites posibles, los otros no, respondió tajante pero aclaró que era una guerra nueva, que la guerrilla del siglo XX fue diferente.

Casas pregunta: Usted sabe que muchos consideran que los delitos cometidos por las FFAA son de lesa humanidad. ¿Considera que los actos de la guerrilla son de lesa humanidad”. Efectivamente señor.

Casas: Los crímenes de guerra, son delito de lesa humanidad?

No lo sé señor, no soy abogado. Son delitos de guerra dijo tranquilamente.

El abogado de Menéndez, Horacio Guerineau le solicita al testigo una reflexión final:

“Mi investigación literaria, dice Acuña, me permite sacar como conclusión que la historia se repite y que hoy existe terrorismo en contra de quienes defendieron a la Patria y lucharon contra el enemigo de la República”. La perspectiva que se abre en Argentina es dolorosa, aseveró. La esencia del derecho está rota, se incorporan elementos ideológicos que deforman la realidad dice Acuña.

Fue el turno del Fiscal Alfredo Terraff:

Habló con el vozarrón que lo caracteriza y dijo: señor Acuña, en su exposición usted dijo que hubo una guerra intencional realizada en nuestro territorio. Dijo también que nuestras FFAA lucharon contra una invasión externa y que hubo guerra. Dijo además que el decreto de la Presidente María Estela de Perón era una declaración de guerra y que había que aniquilar al enemigo y finalmente dijo que el terrorismo atacaba a la población civil para amedrentarlo y convertirlo en enemigo. Le pregunto: ¿qué opina del robo de bebes?

Acuña le dice antes de responder “celebro la exactitud de su resumen señor fiscal”. Respecto al robo de bebés al que suele agregársele la palabra “sistemático”, ha sido demostrado que no ha habido apropiación ilegal de niños y sólo se conocen 8 casos que fueron una demostración de amor” porque les brindaron un nombre, una familia, amor y les abrieron las puertas al mundo” sostuvo mientras los presentes se miraban indignados. Y en cambio sostuvo que hubo guerrilleros que con sus hijos en brazos portaban armas y fusiles. Fue esta sin dudas la respuesta que más irritó tanto público como a los abogados presentes y con la que titularon casi todos los medios en la provincia.

Hablando de amor, le dice el Fiscal con ironía, ¿Qué opina de las probadas judicialmente violaciones a mujeres en centros clandestinos?

No las conozco, respondió Acuña…si me muestra las pruebas…si hubiesen existido me parecería absolutamente reprobable, pero no se me escapa que en ambos bandos hubo civiles que cometieron excesos.

Yo voy a disentir con Casas dice terraff, ya que usted para mí no es “Amicus Curiae” ( que literalmente significa amigos del tribunal) sino un testigo de causa.

“No le entiendo” responde el testigo y Terraff contesta “ y yo no entiendo tantas cosas de las que dice usted”….y prosigue

Usted dijo que por la formación de militares y policías no cree que ellos hayan cometido los hechos de que se los acusa, como se explica entonces que Bussi y Menéndez hayan sido condenados por este mismo Tribunal a cadena perpetua por torturas y desaparición de personas?

“Ni Bussi ni Menéndez han torturado ni secuestrado, ahora si alguien lo hizo debe ser condenado. Si no hay ley que no haya delito, pero un comandante no puede ser condenado por algo que hizo un subalterno sin su conocimiento respondió”

Acuña y qué opina de privaciones ilegítimas de la libertad sin orden judicial y violaciones a la noche?

Responde rápidamente Acuña: “¡Y usted qué opina de personas que han sido secuestradas y escondidas en cárceles del pueblo?, ¿qué opina del asesinato de algún empresario ocurrido acá en Tucumán cuando bajaba de un avión?. Me gustaría que me conteste señor…..nooo, acá el que debe contestar es usted?

Y qué opina de las violaciones a domicilios sin orden judicial señor Acuña?, otra vez responde el testigo ¿Qué opina usted….?. Que es un impertinente!!!! Contesta Terraff fuera de si.

Con total tranquilidad entonces Acuña contesta “Opino que acá hubo una guerra y que las FFAA debieron adecuarse para enfrentarla.

No hubo guerra!!! Hubo genocidio como dicen los carteles del público grita Terraff

Otra vez sin levantar el tono de su voz Acuña le dice “eso no existió en Argentina”.

A ésta altura la temperatura dentro de la Sala subía al compás de las respuestas y todo parecía una olla en ebullición….no habían ya inconductas en el público pero si cuchicheos en cada rincón, los periodistas apostaban a diferentes finales, los querellantes hablaban por lo bajo, los defensores parecían complacidos, el Tribunal observaba sin perder jamás la compostura….el testigo Carlos Manuel Acuña en tanto, muy seguro y dueño de un absoluto dominio de sus sentimientos, quizás por saber que sus respuestas estaban fundamentadas en sus libros producto de profundas investigaciones seguía sentado como si nada pudiera alterarlo.

Laura Figueroa pidió la palabra y dijo que para esa defensa el testigo no reunía las características de “Amicus Curiae“, acá el testigo afirmó con la vehemencia que la caracteriza, es el mejor defensor que he visto y en tal sentido no puede ser un testigo sostuvo. Creo que Acuña ha cometido varios delitos en esta audiencia, agregóy que debe ser interrogado por un fiscal. Por eso no haré preguntas. Los otros querellantes se sumaron a lo dicho por Figueroa y pidieron la investigación del testigo por haber incurrido en “apología del delito” y “falso testimonio”. Además criticaron al testigo por haber dicho “injurias contra ese tribunal al decir que la sentencia a Bussi y Menéndez en 2008 fue un disparate”. Bernardo Lobo Bugeau a su vez desdobló su papel y habló como integrante de la secretaría de DDHH de la Nación y como querellante de la familia Ramos después.

Para concluir Alfredo Terraff con voz severa dijo:

Señor Presidente, en mi carácter de representante del Ministerio Público Fiscal y cumpliendo con mi deber solicito al Tribunal se ordene la inmediata detención del testigo por delito cometido según artículo 213 del Código Procesal Penal de la Nación al haber afirmado “que las apropiaciones ilegitimas de bebés, fueron actos de humanidad y por haber tildado de disparate el fallo de este alto Tribunal. Por lo tanto le reitero que ordenen la inmediata detención del testigo y se lo ponga a disposición del juez competente.

El Presidente del tribunal pidió un cuarto intermedio de 15 minutos. En ése tiempo hubo todo tipo de conjeturas y movimientos, fotógrafos que se alistaban, familiares de Menéndez preocupados, conversaciones y rumores acá y allá.

Finalmente el Tribunal ingresó en la Sala. Carlos Manuel Acuña permanecía impávido como si nada alterara su tranquilidad. Hasta alguien llegó a decir que acaso la detención hubiese sido favorable para muchos, pues se pondría en evidencia la intolerancia y persecución antes quienes piensan diferente.

Mariano García Zavalía dijo entonces: Este Tribunal resuelve, por entender que no existen elementos suficientes para justificar que el testigo haya cometido delito en sus declaraciones, no hacer lugar al pedido del señor Fiscal.

Jiménez Montilla dijo con voz seca: Queda usted desocupado. Acuña contestó amablemente “Muchas gracias señores” y se levantó pausadamente sin que nadie osara en la Sala un insulto o agravio.

Lo cierto es que las declaraciones de este testigo, el primero por parte de alguno de los imputados, habló durante casi 4 horas en la mañana de ayer con libertad ya que el Tribunal Oral Federal dio muestras en cada oportunidad posible de que exigiría respeto hacia él como hacia todos los testigos que se presenten en este mega juicio como le dicen. Las declaraciones de Carlos Manuel Acuña fueron firmes, seguras, fundamentadas. Pueden haber gustado o no y tendrán seguramente diferentes interpretaciones. Es muy posible que lo que yo entendí no coincida en absoluto con algunas crónicas de otros medios. Pero eso hace a la libertad de prensa, de expresión y hasta de sentimiento y por eso hay que rescatarlo.

Hubo, como siempre sucede, sentimientos encontrados. Algunos se fueron molestísimos, otros acongojados y los menos altamente satisfechos con la exposición de este testigo que cuanto menos, es una persona capacitada en el tema y que ha investigado durante años desde el periodismo y después como historiador.

Pero la sensación final es de que por fin alguien se animó a contar, sin pelos en la lengua y sin intereses políticos o militares de por medio, esa parte de la historia que hacen 34 años nos pretenden ocultar. Repetimos, puede gustar o no, uno puede sentirse más o menos representado o identificado con lo dicho por este experimentado periodista pero ésa es la historia y hay que transmitirla para que el día de mañana cada joven pueda formar su opinión libre de censuras y/o imposiciones. A la historia la hacen “los malos y los buenos”, la componen todos los que de una manera u otra han sido protagonistas de hechos relevantes y que se conozca TODA la verdad es lo que todos, desde donde nos toque, debemos procurar.

Acuña salió airoso, caminando sin custodia alguna, convencido de haber dicho su verdad. El tribunal tuvo un gran equilibrio a la hora de tomar decisiones y de hacer respetar al testigo, más allá de cualquier ideología o presión que por ahí se sospeche que puedan tener.

La gente salió conforme o enojada, no importa, pero en ningún momento hubo agravios entre el poco público ni entre los abogados de una u otra parte.

Para mí al menos, eso sí es un triunfo y es una demostración de madurez.

Dios quiera que no me equivoque y ojalá empecemos a comprender de una vez que es hora de terminar con las diferencias, las acusaciones cruzadas, la intolerancia y el autoritarismo. Cada uno puede pensar como quiera o tener la ideología o el credo que prefiera, pero eso no nos hace mejor ni peor persona. Si en cambio el ser respetuosos, pacíficos, comprensivos y tolerantes nos hará diferentes y nos ayudará a todos a poder perdonar.

Fuente: Periodismo de verdad

viernes, 19 de abril de 2013



          2013




CARTA

DEL TCNL. 

(R) V.G.M.


D. EMILIO GUILLERMO NANI.


Herido en la Batalla de La Tablada. 

       El amor a la Patria me impulsó a seguir la carrera militar, a combatir al terrorismo subversivo y a participar en la recuperación de las Islas Malvinas.

En ambas guerras fui gravemente herido y por ambas guerras terminé convertido en genocida violador de los derechos humanos, siendo merecedor del repudio por parte de la misma sociedad que me pedía a gritos que hiciera algo para erradicar el peligro de las bombas, los secuestros y los asesinatos y me alentaba a luchar contra el usurpador inglés.
Desaparecido el peligro terrorista y habiendo sido derrotado en Malvinas, apareció el repudio social. 
Aquellos, a los que nada les importó, en tanto y en cuanto les devolviéramos su tranquilidad y la gloria, fueron los primeros en pedir las cabezas de quienes dieron todo de sí para lograrlo, sumándose a la chusma rencorosa y hoy esperan que algún juez decida armar una causa para privarlos de su libertad, tal como ha sucedido y sucede con casi 700 camaradas que se encuentran ilegal e ilegítimamente privados de las suyas, por decisiones de un poder político corrupto y violento y de jueces federales que, renegando al sagrado cumplimiento del deber, cometen nada menos que 31 aberraciones jurídicas para mantenerlos en las mazmorras del régimen.
Otros 88 han muerto en cautiverio como consecuencia del abandono, la indiferencia y la ausencia absoluta de un adecuado sistema de salud.
Después de esperar en vano algún tipo de apoyo o reacción por parte de esta sociedad apática e hipócrita que, gracias al sacrificio de miles de argentinos, hoy goza de una inmerecida libertad, he llegado al triste momento del arrepentimiento.
Luego de ver sistemáticamente cercenado el derecho a la libertad de aquellos que combatieron al terrorismo en defensa de la Nación y su pueblo,mientras que quienes los atacaron, 

como los reconocidos criminales terroristas Rodolfo Walsh, 

Juan Gelman, Carlos Betttini, Eduardo Luís Duhalde, Rodolfo 

Matarollo, Esteban Righi, Horacio Verbitsky, Eduardo 

Anguita, Hernán Invernizzi, Mario Kestelboim, Luís Mattini, 

Gustavo Plis Steremberg, Jorge Taiana y tantísimos otros, 

gozan de almibarados tratamientos, al arrepentimiento le he 

sumado el asco.
           Me arrepiento de todo lo que he hecho en defensa de mi Patria.
Me arrepiento de lo poco o mucho que hice para impedir que el proyecto castrocomunista que las organizaciones terroristas intentaron imponernos por medio de la violencia, imperara en nuestra Patria.
Me arrepiento de haber contribuido a que los argentinos hoy disfruten de una libertad que no se merecen, por cuanto muchos de ellos, asumiendo un actitud canallescamente miserable, desde esa libertad ganada a costa de sangre, se hacen los distraídos ante los sucesivos ataques a las Fuerzas Armadas, de Seguridad y Policiales que tuvieron la responsabilidad de liberarnos del flagelo del terrorismo.
Con muchísima tristeza he llegado a la conclusión que esta sociedad no se merece una sola gota de la sangre derramada para conquistar esta libertad impidiendo que el proyecto montonero-erpiano-emetepista se adueñara de nuestra Patria; no se merece una sola lágrima de los familiares y amigos de aquellos que dieron su vida en su defensa; no se merece un solo segundo de la angustia de los seres queridos de aquellos que hoy padecen injusta privación de libertad.
Es por ello que, siendo consciente que es poco menos que imposible la instauración en nuestro país de un régimen estilo Cuba, Nicaragua o de la Europa del Este, que sumieron a sus pueblos en el atraso, la miseria y la desesperanza, mientras sus jerarcas se enriquecían a costa de su sufrimiento, he decidido apoyar cualquier proyecto que, aunque de lejos, se les parezca.
Por todo lo expuesto deseo que el actual gobierno logre “profundizar su modelo”, para que:

                Pueda terminar de arrasar con la propiedad privada.
El sistema de salud continúe llevando a la muerte segura

a miles de argentinos.
La inseguridad siga desarrollándose hasta su máximo esplendor.
La droga, el desenfreno y el alcohol continúen descerebrando 
a niños y adolescentes.

                Los empresarios amigos del poder, como los Eskenazi, los Lázaro Báez, los Cristóbal López, los Werthein, los Elsztain, los Ferreyra, los Sergio Tasselli, los Aldo Ducler, los Rudy Ulloa Igor, los Albistur, etc. y los integrantes de los poderes del Estado puedan seguir enriqueciéndose a costa del hambre, la desesperación y la muerte del pueblo argentina.                                                                    
El narcotráfico siga financiando las campañas políticas del oficialismo.                                                                                           
De una vez por todas desaparezcan las libertades de prensa y expresión.                                                                                      Los accidentes de tránsito sigan cobrando miles de víctimas.                                                                                               Cientos de idiotas escondidos detrás de sus computadoras y Nicks,  puedan seguir insultando, sabiendo que difícilmente los destinatarios de sus agravios se enteren de ello, y continuar librando sus “gloriosos” combates virtuales, exigiendo a otros lo que no son capaces de hacer.                                                                     El juego de Cristóbal López continúe llevando a la pobreza a aquellos que, en su desesperanza, busquen una “salvación” económica que nunca llegará.
El sistema educativo siga embruteciendo a nuestros niños y jóvenes.
Las constantes violaciones a la Constitución Nacional continúen el largo crecimiento de los perjuros que, año a año declaman defenderla  
y nada hacen por conseguirlo.
Los medicamentos falsos maten a los sobrevivientes de la inseguridad,  
los accidentes de tránsito y las drogas.
Los sindicalistas puedan comprar campos y empresas
a costa de la desocupación, indigencia y pobreza de sus representados.
Los De Vido, Jaime, Uberti y sus empresarios amigos sigan haciendo pingües negocios a costa del saqueo y despilfarro de los recursos de la ANSES.
Los desaparecidos fondos de Santa Cruz
continúen en poder del matrimonio K.
Se terminen de destruir el Sistema de Defensa Nacional
y las Fuerzas Armadas.
Puedan lograr la obligatoriedad de todas las mujeres a abortar
y el matrimonio entre homosexuales.
La violencia siga asesinando a aquellos que, con su trabajo fecundo,  
han contribuído a que la Argentina subsista a pesar de los esfuerzo de la corporación política más corrupta de nuestra historia.
Los organismos públicos se sigan poblando con familiares, amigos y
amantes de los detentadores del poder, mientras que a millones de argentinos se les niegue el acceso a un trabajo digno.
Los funcionarios puedan seguir utilizando los bienes del Estado
en beneficio propio.
Los terrenos que quedan en El Calafate sigan vendiéndose 
a precio vil a los amigos del poder.
Los subsidios, los fideicomisos y los fondos fiduciarios continúen despilfarrándose yendo a parar a los bolsillos de corruptos funcionarios.
Las bolsas con dinero que aparezcan en los baños ministeriales
dejen de preocupar a los ministros.
Los dineros mal habidos y las facturas falsas se puedan blanquear definitivamente.
Las muertes políticas como la de Cacho Espinosa, Julio López y Vittorio Gotti queden en el olvido.
Los órganos de control sigan descontrolados.
Los Claudio Uberti puedan conseguir más valijas con dólares.
Así como usaron los vuelos de Southern Winds para traficar drogas,
ahora puedan hacer lo mismo con nuestra “recuperada” línea de bandera.
Puedan seguir haciendo desaparecer personas caídas en redes de prostitución o en el tráfico de órganos.
Todo el pueblo argentino quede excluido de toda posibilidad de paz social, tranquilidad y prosperidad.
Sigan anunciando obras públicas que nunca se llevarán cabo
y se paguen por ellas sobreprecios que continúen engordando las arcas de los detentadores del poder.
Los jueces puedan terminar de sobreseer a los ladrones
enriquecidos ilícitamente.
Se consoliden nuestros vínculos bolivarianoindigenistas con Chávez,
Morales, Correa, Zelaya y Castro, de modo tal de quedar definitivamente fuera del mundo desarrollado.
Los jueces puedan continuar utilizando el delito del prevaricato
como metodología para negar Justicia.
Lograr que la Argentina ocupe el máximo sitial en corrupción.
La juventud K pueda seguir volando gratis en Aerolíneas Argentinas
para ver eventos deportivos, mientras el pueblo se sigue muriendo de hambre.
Sigan destruyendo el aparato productivo y continúen adueñándose
de empresas como YPF, Aerolíneas Argentinas, Papel Prensa, Massuh, Banco de Santa Cruz, etc.
El odio, la venganza y la confrontación permanente
sigan enseñoreándose en nuestro país. 
En fin, para que la unión nacional, el afianzamiento de la justicia, la consolidación de la paz interior, la provisión a la defensa común, la promoción del bienestar general y la seguridad de los beneficios de la libertad establecidos en el Preámbulo de nuestra Constitución Nacional y la propia Constitución Nacional, queden definitivamente convertidos en letra muerta.
Tal vez no lleguemos a ser como Cuba, Rumania o Alemania Oriental, pero al menos nos pareceremos.
Tal vez sea en ese momento en que esta sociedad despierte y tome conciencia -aunque tarde- de lo que pudimos haber sido y, por su hipocresía, cinismo e indolencia, no pudimos ser.

Emilio Guillermo Nani
 
L.E. 4.526.260


Es el Soldado,
no el periodista quien nos ha dado
la libertad de prensa,
Es el  Soldado,
no el poeta quien nos ha dado
la libertad de expresión,
Es el Soldado,
no los políticos, el que garantiza nuestro derecho a la vida,
a la libertad
y a la búsqueda de la felicidad...
Es el Soldado
quien saluda a la Bandera , el que sirve bajo la Bandera
y cuyo ataúd
está envuelto en la Bandera.